Investigación-Acción 1994-1995
subvencionada por la “Unidad para la igualdad de oportunidades” de la
Comisión Europea
La ciudad, la ciudadanía y el
género
CARTA EUROPEA DE LA MUJER EN LA CIUDAD
Por
el “Derecho de la mujer a la ciudad”
Por una democracia
paritaria para mejorar el marco de vida general.
Plataforma común de reflexión sobre el plan
europeo
City &
Shelter - Bruselas,
Bélgica - Fopa - Dortmund,
Alemania Groupe Cadre de Vie - Meudon,
Francia - Praxis - Atenas,
Grecia Seirov Nirov - La
Haya, Países Bajos.
¿Cuáles son los principales elementos
y factores que influyen en la vida de la mujer en la
ciudad?
-
La repartición y las posibilidades de acceso al empleo. -
La importancia y la calidad de los servicios de proximidad y los
servicios comunitarios, en particular para ocuparse de los
niños. -
El acceso a los centros de decisiones de las ciudades, la cultura y
las actividades de ocio. -
La seguridad y las medidas contra todos los factores de inseguridad
en las ciudades. -
El aumento de movilidad de hombres y mujeres, lo que supone un
equilibrio entre el transporte colectivo y el transporte individual,
decidido de una forma más democrática. -
La calidad y la conservación del medio ambiente.
¿De qué medios disponemos para
expresar los intereses de la mujer?
-
Obtener la participación de las mujeres y cambiar los modos de toma
de decisiones. -
Multiplicar los intercambios de información y los proyectos
innovadores. -
Determinar los principales indicadores socioeconómicos y culturales
de la ciudad, desde el punto de vista de la mujer. -
Sensibilizar y enseñar a los hombres el proceso de reflexión con
plena consideración del factor género, es decir, de ambos
sexos.
PREAMBULO
Consideramos esta carta
como una iniciativa de análisis permanente y abierta, con varias
propuestas concretas que podrían conducir a una ciudadanía más activa de
las mujeres en las actividades de ordenamiento territorial y la vida de la
ciudad.
Establecemos como premisa que no existe un interés
particular la mujer, pero sí afirmamos que la mujer puede tener una
función catalizadora en el proceso de cambio y mejora del marco de vida de
todos, hombres y mujeres.
LOS OBJETIVOS DE LA
CARTA
La propuesta de una “Carta de la mujer en la ciudad”
pretende contribuir a una nueva filosofía de planificación urbana, para
alimentar de forma constructiva un verdadero debate democrático que tenga
en cuenta las necesidades y las aspiraciones de los ciudadanos y las
ciudadanas. El esfuerzo que
se realiza para dinamizar las ciudades debe servir para establecer nuevas
prioridades políticas y económicas orientadas a una mayor armonización
social. Se trata de
reconstruir los centros urbanos y las relaciones de cohesión social para
ofrecer las mismas oportunidades a las mujeres y a los hombres, en el
campo y en la ciudad.
El primer objetivo de esta Carta es el
desarrollo de una sociedad más emancipada, libre de los estereotipos que
impiden una evolución favorable a la participación de la mujer en el
ordenamiento y los servicios urbanos, de entorno de vida, de seguridad y
de movilidad.
Es importante evaluar y remodelar la ciudad desde el
punto de vista de la mujer, para aportar nuevos equilibrios y una nueva
dimensión.
HACIA UNA
FILOSOFIA DIFERENTE DE LA CIUDAD Cambiar los enfoques y las
mentalidades
Acciones necesarias para lograrlo:
-
Eliminar los obstáculos que todavía impiden a la mujer disfrutar
plenamente del “Derecho a la ciudad”. -
Hacer tomar conciencia de estos problemas a los diferentes agentes
que actualmente toman las decisiones en los campos del ordenamiento
territorial, la vivienda y el marco de vida. -
Promover la revitalización y la renovación democrática de los
sistemas de toma de decisiones en el campo de la planificación urbana y el
marco de vida. Debe
garantizarse la participación de la mujer en todas las instancias y en
todos los niveles de concertación y decisión.
-
Favorecer el desarrollo de un nuevo interés, una nueva dinámica de
toma de responsabilidades.
Esta forma de “ciudadanía activa” hará que las decisiones se
acerquen más a la base social y a las preocupaciones cotidianas de los
ciudadanos y las ciudadanas.
-
Favorecer el desarrollo de otra filosofía de planificación urbana y
de ordenamiento territorial,
centrada en los valores humanos.
-
Apoyar una dinámica de cambio que redundará en beneficios para
todos los miembros de la actual sociedad “plural”.
EL FACTOR GENERO EN
UNA SOCIEDAD PLURAL Para
iniciar el cambio es importante tener en consideración las relaciones
históricas y socioculturales entre las mujeres y los
hombres.
Condiciones necesarias: -
Instaurar la paridad en las instancias de decisión, para garantizar
la igualdad de oportunidades entre los hombres y las
mujeres.
-
Crear una nueva cultura que sea común a los hombres y las mujeres,
centrando la renovación intelectual en el análisis y las consideraciones
relativas al factor género.
-
Equilibrar la visión masculina con la visión y la percepción
femeninas, que son elementos innovadores para dar nuevas fuerzas a la
dinámica urbana.
Citas: “Para detener
esta carrera a la catástrofe, nuestras sociedades deberían considerar sus
opciones de futuro, las alternativas y las prioridades. Debemos pensar en los significados
y no tanto en los medios, y debemos dar nuevamente prioridad a los valores
no comerciales (morales, éticos, humanos).” (Michel Beaud,
Profesor de economía en la Universidad París VII - Le Monde
6.9.1994)
“Las mujeres se
interesan por conocer en detalle el funcionamiento de las cosas. Tomando como ejemplo las obras
para la circulación de peatones, prefiero comprobar personalmente los
resultados, porque casi siempre los ingenieros son hombres y su modelo de
peatón usa zapatos de hombre. Si queremos que la ciudad sea accesible y
bien pensada para todos, debemos recordar que muchas mujeres llevan
zapatos de tacón alto. Si las
superficies son cómodas para la mujer, sin diferencias de nivel ni
obstáculos, los minusválidos también podrán circular mejor. Este es mi enfoque en la política:
partir de la situación concreta de los ciudadanos. Por eso me interesa la situación
de la mujer, la diversidad de situaciones en que participa”...
“No
es suficiente reivindicar la paridad o la igualdad; hay que contribuir a ello y las
mujeres pueden hacerlo. Me
parece muy importante porque he podido comprobar que las mujeres en la
actividad política siempre buscan alternativas en vez de crear
enfrentamientos.” (Catherine Trautmann, Alcalde de Estrasburgo
- Entrevista de Véronique Degraef, 1994)
Carta europea de la mujer en la ciudad
ENUNCIADO DEL
PROBLEMA “La ciudad es una
memoria organizada” “La
historia ha dejado a un lado a las mujeres” (citas de la filósofa Hannah
Arendt)
Porque las mujeres no forman parte (o sólo de forma
insignificante) de ninguno de los niveles de decisión que influyen en la
creación y la gestión de la ciudad, el entorno de vida y el ordenamiento
territorial. Considerando que
su influencia es todavía muy reducida en las importantísimas cuestiones
políticas, económicas y sociales en este campo. Considerando que los programas no
tienen en cuenta sus necesidades específicas, porque no coinciden con los
intereses de los agentes de decisión omnipresentes.
Porque el marco de vida en la
ciudad (a nivel del barrio y la vivienda) influye y determina fuertemente
la realidad cotidiana de sus habitantes, hombres y mujeres, pero
especialmente de las mujeres porque muchas tienen doble jornada de trabajo
y dependen por eso más de la calidad de los servicios urbanos y de las
opciones adoptadas para transporte y medio ambiente.
Porque la mujer está
doblemente excluida: no tiene el voto que le corresponde como usuario de
la ciudad y tampoco participa en el diseño de los proyectos urbanos y de
vivienda.
Porque la
condición para ser ciudadano o ciudadana es pertenecer a un lugar, y que
tanto las características como la calidad de este lugar influyen en el
ejercicio de su ciudadanía.
Considerando que los principios de acción, las prioridades, las
decisiones políticas y presupuestarias en particular han sido desde
siempre y son aún hoy definidas sólo por los hombres, aunque convencidos
de actuar en beneficio de la comunidad en general.
Porque las mujeres sufren una
mayor discriminación en oferta de empleo, que constituyen el sector de
población relativamente más pobre y que sufren los peores efectos del mal
funcionamiento de las ciudades en la dificultad de acceso a la vivienda,
las limitaciones de movilidad y ante todo la violencia, porque son las
primeras víctimas. La
población femenina es por estos motivos la más interesada en mejorar el
desarrollo urbano y el ordenamiento rural.
Porque para efectos de
planificación urbana sólo se considera el modelo de familia nuclear, con
la mujer dedicada a las labores domésticas y sólo el hombre trabajando
fuera del hogar. Este modelo
que ha generado los estereotipos sociales es cada vez menos
representativo, desde hace varias décadas, y ya es minoritario,
reemplazado por otros modelos de familias que no han sido considerados en
las decisiones de urbanización.
Esto ha generado problemas de funcionamiento y nuevas tensiones
sociales.
Porque numerosas ciudades en
Europa y en otros continentes se encuentran en crisis y ponen gravemente
en peligro el equilibrio y la paz social. Esta situación resulta de unos
problemas complejos que requieren un tratamiento global. La aplicación de teorías y métodos
de urbanismo obsoletos impide una evolución y la necesaria innovación,
produce y mantiene el síndrome de crisis de las ciudades. La Carta de Atenas de Le
Corbusier, que dividía la ciudad en zonas con funciones diferentes, ha
tenido resultados negativos y con el tiempo ha generado graves
problemas. Los resultados
tangibles son los barrios en crisis o zonas “sensibles”, la exclusión
social y los costes sociales y económicos que supone un desplazamiento más
importante entre la vivienda y el lugar de trabajo remunerado. Estas opciones urbanas también han
producido contaminación y atascos en las ciudades. Debemos rechazar ya estas opciones
que tienen graves repercusiones para la calidad de vida de los ciudadanos
y que ponen en peligro el futuro de las ciudades.
Porque las ciudades se
enfrentan hoy a dificultades sin precedentes para lograr los siguientes
objetivos: conservar el medio
ambiente y garantizar un desarrollo duradero, favorecer una mejor calidad
de vida y condiciones más iguales para todos, solucionar los problemas de
funcionamiento urbano y evitar la exclusión, preparar una democracia más
activa y más equilibrada en la actual sociedad “plural”, sociedad en la
que la mujer tiene intereses a todos los niveles.
Es indispensable adoptar otro enfoque
y decidir cambios estructurales en la aplicación de políticas de
ordenamiento urbano en Europa para hacer frente a estas dificultades. Las soluciones exigen
necesariamente la participación de las mujeres, por legitimidad
democrática y también porque es un agente esencial de renovación de la
dinámica urbana.
Carta europea de la mujer en
la ciudad
DECLARACION EN 12 PUNTOS
“Para
que las mujeres tengan plenamente derecho a la ciudad.”
1. LAS MUJERES EN LA CIUDAD Y LA
CIUDADANIA ACTIVA
En la reflexión sobre la forma de ejercicio
de la ciudadanía activa debemos considerar, por una parte, la influencia
del marco de vida y, por otra parte, el funcionamiento de las instancias
de representación y los mecanismos económicos y políticos que forjan la
ciudad.
Una representación democrática más real. Definición de otra filosofía de
planificación urbana.
El objetivo es eliminar los obstáculos que
todavía limitan el acceso de las mujeres a la vida de su ciudad,
definiendo y proponiendo medios para favorecer el ejercicio de una
ciudadanía más activa.
Para ser plenamente ciudadanas, las mujeres
todavía deben hacer suyos lugares y servicios de su entorno cotidiano a
todos los niveles, desde el espacio de vida privado hasta la completa
participación en la vida pública.
Esto supone una acción que ponga de manifiesto las formas de
discriminación de la mujer que todavía persisten en los mecanismos de
creación y gestión de las ciudades.
Las condiciones históricas y
socioculturales que han determinado las diferencias entre los hombres y
las mujeres han creado una forma de discriminación en el ordenamiento de
los espacios urbanos y en la calidad del marco de vida, pero también una
forma de exclusión más general, de orden económico, social y
cultural. La ciudad ha de ser
considerada como el revelador de estas discriminaciones.
2.
LAS MUJERES EN LA CIUDAD y la
TOMA DE DECISIONES y la DEMOCRACIA PARITARIA
Las mujeres deben ser incluidas en
todos los niveles de decisión para el ordenamiento del territorio, el
espacio urbano, la vivienda, el transporte y el medio ambiente.
Una democracia paritaria a todos los
niveles de decisión.
Participar en la toma de decisiones es una
de las condiciones importantes de la emancipación. El índice de participación de la
mujer es particularmente bajo en los campos del ordenamiento territorial y
la planificación de la ciudad y del entorno de vida. La ciudad se ha hecho sin las
mujeres y todavía evoluciona prácticamente sin ellas. Sus preocupaciones cotidianas no
tienen prioridad en la política.
Por eso las mujeres deben tomar
parte en todos los campos que determinan el marco de vida, y el objetivo
ha de ser una participación paritaria. Han de tener voz en todos los
debates, en todos los centros de decisiones técnicas o políticas a todos
los niveles, local o europeo.
Las mujeres representan la mitad de la reserva de talento y de
competencia de la humanidad.
Su insuficiente representación en los puestos de decisión es una
pérdida para la sociedad en general.
El proyecto urbano es uno de
los grandes desafíos a las puertas del siglo XXI: una de las principales condiciones
para la renovación democrática es adoptar procesos que supongan una mayor
participación de las mujeres en la toma de decisiones.
3. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y la
IGUALDAD DE OPORTUNIDADES
Es importante favorecer la igualdad
de oportunidades en la educación y la investigación, en los organismos
profesionales y en el ejercicio de todas las profesiones que intervienen
en el ordenamiento territorial, del espacio urbano, la vivienda, la
movilidad y la seguridad en las ciudades.
Conscientes de que las condiciones
democráticas no se imponen solas.
Debemos adoptar políticas de
incitación que refuercen la presencia de las mujeres en los sectores de
actividad que intervienen en el ordenamiento urbano y en la
construcción.
El principal objetivo es cambiar la mentalidad
misógina de estos sectores, alejándose de la imagen de la “mujer de hogar”
que transmiten los medios de comunicación y los libros escolares, y dando
relieve a las mujeres que crean, arquitectas, urbanistas,
etc..
También debemos promover el acceso a la profesión de las
mujeres licenciadas de institutos de arquitectura y urbanismo, y ha de ser
reconocida su práctica profesional.
4. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y la
PARTICIPACION
Debemos adoptar procesos de
participación de la mujer con una repartición más justa, para favorecer la
aparición de nuevas relaciones de solidaridad.
Suscitar niveles intermedios de
decisión. Proponer estrategias de cambio.
Es necesario
instaurar una verdadera “democracia urbana paritaria” para poder
intercambiar los diferentes puntos de vista y realizar las opciones más
apropiadas en lo referente al empleo, la vivienda, la coexistencia social,
los valores culturales y la calidad del medio ambiente.
Es
importante que las mujeres tengan acceso a la información sobre la gestión
de los fondos públicos, la toma de decisiones, la atención prestada a las
diferentes necesidades y aspiraciones de todos y a las opciones de
soluciones.
También debemos crear espacios de iniciativas y de
autonomía controlados por los habitantes, hombres y mujeres. Los niveles intermedios de
decisión pueden funcionar como escuelas de la ciudadanía activa, foros
donde se consideran los intereses de todos (por tanto de las
mujeres).
5. LAS
MUJERES EN LA CIUDAD y la VIDA COTIDIANA
Es preciso convertir en tema político
las condiciones de la vida cotidiana analizadas desde la perspectiva de la
mujer.
Desarrollar
acciones concretas que se completen mutuamente.
Un enfoque
feminista de la ciudad puede contribuir a dar otro tratamiento a las
injusticias que sufren las minorías y los “invisibles”, porque las mujeres
forman parte de esta categoría. Podremos incluir nuevas variables si
consideramos el ordenamiento de la ciudad, las relaciones entre las
funciones urbanas y la calidad del medio ambiente a partir de las
condiciones de la vida cotidiana.
Las mujeres tomarán así
conciencia de su identidad, de sus capacidades de intervención y de sus
necesidades, podrán establecer relaciones sociales y participar más
activamente para resolver los problemas de la vida
cotidiana.
6. LAS
MUJERES EN LA CIUDAD y el DESARROLLO DURADERO
Las mujeres deben tener plena
participación en la definición de políticas para preservar los equilibrios
ecológicos del planeta.
La Tierra en que vivimos no es
nuestra, pertenece a la siguiente generación.
La conservación
del medio ambiente es hoy una prioridad para el desarrollo duradero de las
ciudades (Conferencia de Río).
Las mujeres son particularmente conscientes de los problemas de
calidad medioambiental, y saben que es uno de los grandes temas de la
política de desarrollo (referencia al Plan 21 de las mujeres). Los movimientos de mujeres
consideran con especial interés esta nueva dimensión de la economía y del
ordenamiento territorial.
7. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y las
CONDICIONES DE SEGURIDAD Y MOVILIDAD
Todas las mujeres, en particular las
mujeres solas y las más desfavorecidas, deben tener fácil acceso al
transporte para poder desplazarse libremente y con toda seguridad. Es indispensable para entrar
verdaderamente en la vida económica, social y cultural de la ciudad. Las mujeres también tienen
“derecho a la ciudad”.
Prioridades del cambio: la seguridad y la movilidad de las
mujeres.
Es preciso reconsiderar y completar el concepto de
seguridad urbana, diurna y nocturna, dando prioridad a los puntos de vista
de las mujeres. Dado que las
mujeres son con demasiada frecuencia el blanco de agresiones y de la
expresión de la violencia, es necesario corregir los proyectos y las
realizaciones que determinan las condiciones urbanas y analizarlos con
especial atención tomando como referencia los modelos
apropiados.
Como el riesgo de aislamiento es dos veces más
importante para las mujeres que sufren de una exclusión social o cultural,
esta categoría necesita una atención particular en las políticas
encaminadas a una mejor movilidad de los ciudadanos, hombres y
mujeres.
Una ciudad más segura favorece la movilidad de todos, en
particular de las mujeres. El
sentimiento de vivir en seguridad es parte de la cohesión social y la
refuerza.
8. LAS
MUJERES EN LA CIUDAD y el DERECHO A LA VIVIENDA Y A UN ENTORNO DE
VIDA
Las mujeres tienen derecho a una
vivienda y a un entorno de vida apropiados.
Prioridades del cambio: la calidad y la diversidad de los
entornos de vida y los servicios de proximidad.
Cuando el
entorno de vida, el barrio y la ciudad no ofrecen espacios apropiados para
las necesidades de las mujeres, creados por ellas y para ellas, la mujer
pierde su identidad y el ejercicio de su ciudadanía se reduce. Todos los espacios públicos y
privados son definidos y desarrollados exclusivamente por hombres, o aplicando criterios
masculinos, sin tener en cuenta las necesidades manifestadas por las
mujeres, y prestando muy poca atención a la diversidad de
expectativas. Para la calidad
del entorno de vida también son esenciales los servicios de proximidad que
hacen más llevaderas las obligaciones que aún hoy en la mayoría de los
casos asumen las mujeres.
También es innegable la particular
preocupación de las mujeres por la falta de espacios dedicados al
esparcimiento de sus hijos.
9. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y el
FACTOR GENERO
Debemos admitir el factor género en
la ciudad como la fuente de una nueva cultura compartida, y debemos
participar en la definición de una nueva filosofía del ordenamiento
territorial.
Estimular
la formación para tener en cuenta el factor género y para desarrollar una
nueva filosofía democrática.
El estudio de las relaciones
históricas y socioculturales entre los hombres y las mujeres puede
facilitar la formulación de soluciones nuevas y más realistas para la
crisis urbana, y contribuir a mejorar el marco de vida. El factor del “género”, entendido
como el estudio de las relaciones sociales desarrolladas entre los hombres
y las mujeres, es un medio eficaz para desmontar los estereotipos y
considerar la ciudadanía desde un punto de vista más apropiado.
10. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y la
EDUCACION y la EXPERIMENTACION LOCAL
Es importante que las escuelas, las universidades y los
institutos de arquitectura y urbanismo enseñen a considerar el factor
género en la ciudad. Es
urgente lanzar la experimentación en las ciudades para incitar al
cambio.
Adquirir conocimientos, información y
competencias. Hacer un seguimiento permanente para identificar el
progreso realizado. Experimentar a escala
natural.
Es
necesario realizar investigaciones y peritajes para determinar en qué
medida han sido discriminadas las mujeres en los programas de ordenamiento
territorial y del marco de vida.
Es importante que se enseñe a considerar el factor género en los
cursos universitarios y en la enseñanza media, y debe reconocerse que es
indispensable la aportación de conocimientos de este
factor.
También es importante apoyar las operaciones piloto que
pueden generar nuevos comportamientos políticos que tengan en cuenta este
factor.
11. LAS
MUJERES EN LA CIUDAD y la FUNCION DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIONy la
TRANSMISION DE COMPETENCIAS
Los medios de comunicación deben
publicar mensajes contrarios a los estereotipos, que den una imagen de la
mujer conforme con su evolución y su emancipación.
Transmitir y divulgar los
conocimientos y las competencias.
Es importante que los medios
de comunicación se hagan eco de las investigaciones y las competencias
para que puedan beneficiar a todos y estimular así la transformación
social, reemplazando a las figuras sociales obsoletas que impiden la
emancipación de toda la sociedad.
12. LAS MUJERES EN LA CIUDAD y las
REDES DE INFORMACION
Debemos crear una red para
intercambio de información a escala europea, para divulgar la Carta y
apoyar la aplicación de sus principios.
Divulgación de la Carta. Lanzar la
iniciativa con la necesaria determinación política a escala
europea.
Resulta indispensable una red europea de intercambio
de información para catalizar las acciones y cambiar las
mentalidades. Las
contribuciones en este aspecto, especialmente de los países escandinavos y
de América del Norte, pueden servir de inspiración para otras formas de
acciones positivas. Es
importante conectarse a otras redes internacionales para desarrollar
relaciones de solidaridad entre las mujeres a escala mundial en el
tratamiento de problemas similares, y para afirmar la presencia europea en
otros continentes, especialmente en las organizaciones
internacionales.
----------------------------------------------------
¿Qué es el factor
género?
Hay muchas teorías feministas, pero todas tienen un
punto de partida común: las
relaciones entre los sexos en nuestra sociedad y en todas las sociedades,
se caracterizan por la mayor o menor dominación de uno de los sexos, que
ha reducido al otro a una función y una imagen determinadas. Por consiguiente, debemos
desarrollar una crítica de estas relaciones, teórica y en el plano
político, y actuar positivamente para definirlas de otra forma.
La
estructura actual de la sociedad por el factor de sexo o de género
(“construction sociale de sexe” según el enunciado francés, o “gender
issues” según el enunciado inglés) es una producción histórica (pese a ser
secular) que no corresponde a la “realidad” de los sexos.
Los
enfoques se separan a partir de esta reivindicación común y podemos
distinguir dos corrientes de pensamiento. La primera, que podríamos llamar
esencialista, afirma que existe una esencia o una naturaleza femenina que
debemos redescubrir bajo las construcciones que la han ocultado o
deformado. La segunda, que
podríamos llamar humanista o racionalista, sostiene que el problema radica
precisamente en hacer una distinción sexual, y argumenta que los hombres y
las mujeres tienen la misma razón pese a sus diferencias, una razón que
los hombres se han apropiado hasta ahora sin derecho ...
Tomado de Françoise Collin,
Filósofa. (Extracto de un artículo en Présences 1991 - “Deux sexes,
c’est un monde”)
La Carta europea de las mujeres en la
ciudad es una investigación-acción subvencionada por la Unión
Europea Comisión Europea -
Dirección General V - Empleo, relaciones industriales y asuntos sociales -
Unidad para la igualdad de oportunidades. Agnès Hubert (Responsable de
Unidad) y Maria Stratigaki (experta-responsable del dossier) Fax:
(32-2) 235.35.62
EQUIPO DE
LA INVESTIGACION / ACCION en 1994 ** Asociación mandante
EUROCULTURES asbl c/o ISA St Luc, 57, Rue d'Irlande, B - 1060
Bruxelles, Tel.: (32-2) 534.59.66, Fax: 534.63.15 ** Grupo de
trabajo Ursula Heiler - FOPA e.V. -
Feministische Organisation von Planerinnen und
Architektinnen
Adlerstraße 81, D-4600 Dortmund, Tel.: (49-231) 14.33.29, Fax:
(49-231) 16.21.74 Roland Mayerl (Coordinador del
proyecto) - CITY & SHELTER -
40, Rue d'Espagne,
B-1060 Bruxelles, Tel + Fax: (32-2) 543.77.35 Monique Minaca - GROUPE CADRE DE
VIE -
60, Avenue Jean-Jaurès, F-92190 Meudon, Tel.: (33-1) 45.34.27.17
Fax: 46.23.18.68 Liesbeth Ottes - SEIROV / NIROV
-
Nederlands
Instituut voor Ruimtelijke Ordening en Volkshuisvestiging
Postbus 30833; NL-2500 GV Den Haag (Mauritskade 21, 2514 HD Den
Haag)
Tel.: (31-70) 346.96.52, Fax: (31-70) 70.361.74.22 Annie Vrychea - PRAXIS -
Gioni 8, GR-Athen 117
42, Tel.: (30-1) 92.28.222, Fax: (30-1) 92.28.234 La Carta es el fruto de un trabajo de
equipo. La redacciÓn final a estado a cargo de Monique Minaca y Roland
Mayerl. ** Comité científico Bianca Beccali - Faculta di
Scienze Politiche -
Via Conservatorio 2, I-Milano 22100, Tel.:
(39-2) 76.074.301, Fax: (39-2) 78.06.57 Jacqueline Coutras - CNRS - GEDISST IRESCO -
59-61 Rue Pouchet, F-75849 Paris cedex 17, Tel.: (33-1)
43.26.71.87, Fax: 40.25.12.03 Eliane Gubin - Université Libre
de Bruxelles (ULB) -
86, Av. Pierre Curie, B-1050 Bruxelles, Tel.: (32-2) 650.38.07,
Fax: (32-2) 650.39.19 Alice Reite - GAIA-Gruppen -
Skovveien 49, N-0258 Oslo, Tel.: (47-22) 56.17.61, Fax: (47-22)
56.17.64 Marijke van Schendelen - Institute of Planning and
Demography -
University of Amsterdam, Nieuwe Prinsengracht 130, NL-1018
VZ-Amsterdam
Tel.: (31-20) 525.40.47, Fax: (31-20)
525.40.41, Privat: (31-20) 20-632.34.88 Dina Vaiou - Dept. Urban and
Regional Planning National Technical -
University of Athens, 42 Patission, GR-Athens 10682
Tel.: (30-1) 33.01.785,
Fax: (30-1) 33.01.143 Odette
Isabel - Corporation Professionelle des Urbanistes du Québec
-
5222 A Rue Marquette Nintréal, CAN-Québec - H2J 3Z3
Tel.:
(1-514) 523.5370, Fax: (1-514) 488.5384 Traducciones:
Miriam Brunson
Catálogo: Carole Christophe Base de datos: Roselyne
Hermal
DIFUSION INTERNACIONAL DE LA CARTA EN
1995 City &
Shelter 40, Rue
d'Espagne, B-1060 Bruselas, Bélgica, Tel. + Fax: (32-2)
534.77.35 e.mail: city.shelter@skynet.be
http://www.cityshelter.org/ Groupe Cadre de Vie - 60, Av.
Jean Jaurès, F-92190 Meudon, Francia, Tel.: (33-1) 45.34.27.17, Fax:
(33-1) 46.23.18.68
Contenido del
documento: - Los objetivos de la
Carta
Definición de otra filosofía de la ciudad
El
factor género en una sociedad plural - Presentación del
problema - La
declaración en 12 puntos - El equipo de
investigación-acción
Contenido de otros documentos
disponibles con la Carta:
II.
Los 5 temas prioritarios
Los criterios básicos para la reflexión
Investigaciones que deben realizarse
Acciones que deben realizarse
Cartas europeas referentes al entorno de vida y al medio
ambiente
A. La planificación urbana y el medio ambiente
B. La movilidad
C. La seguridad urbana
D. El entorno de vida
E. Las estrategias
III. La
base de datos
- Archivo de publicaciones
- Archivo de personas recursos
IV.
El catálogo de acciones positivas
66 estudios de casos con los datos de los
interlocutores.
Tema A:
Planificación urbana
Fichas 1 a 9
Tema B: Mujeres
arquitectas
Fichas 10 a 16
Tema C: Entorno
de vida
Fichas 17 a 25
Tema D: Seguridad
Fichas 26 a 36
Tema E: Iniciativas
institucionales
Fichas 37 a 46
Tema F:
Conocimientos
Fichas 47 a 57
Tema G: Mujeres
en los países del Sur
Fichas 58 a 66
V.
Anexos
- Actividades de la Comisión Europea en el campo del
urbanismo.
- “Los procesos de decisión de los hombres y las mujeres en
lo referente al espacio urbano y el entorno de vida, en los
institutos de arquitectura y a nivel institucional.”
(Investigación-acción europea de 1993)
- Comentarios sobre la Carta de la mujer en la ciudad.
(Claire Billen, Eliane Gubin)
- ¿Es la ciudad actual un producto de la división sexual del
trabajo? (Jacqueline
Coutras)
- Los hombres:
un largo camino hacia la autonomía. (Daniel Welzer-Lang)
- Función y
representación de la mujer en la planificación urbana y regional
para un desarrollo duradero.
(Dina Valou) |
CARTA EUROPEA DE LA MUJER EN LA
CIUDAD Declaración en 12
puntos
Las mujeres
en la ciudad y ...
1.
la ciudadanía activa
En la reflexión sobre la forma de ejercicio de la ciudadanía activa
debemos considerar, por una parte, la influencia del marco de vida y, por
otra parte, el funcionamiento de las instancias de representación y los
mecanismos económicos y políticos que forjan la ciudad.
2.
la toma de decisiones y la democracia paritaria
Las mujeres deben ser incluidas en todos los niveles de decisión
para el ordenamiento del territorio, el espacio urbano, la vivienda, el
transporte y el medio ambiente.
3.
la igualdad de oportunidades
Es importante favorecer la igualdad de oportunidades en la
educación y la investigación, en los organismos profesionales y en el
ejercicio de todas las profesiones que intervienen en el ordenamiento
territorial, del espacio urbano, la vivienda, la movilidad y la seguridad
en las ciudades.
4.
la participación
Debemos adoptar procesos de participación de la mujer con una
repartición más justa, para favorecer la aparición de nuevas relaciones de
solidaridad.
5.
la vida cotidiana
Es preciso convertir en tema político las condiciones de la vida
cotidiana analizadas desde la perspectiva de la mujer.
6.
el desarrollo duradero
Las mujeres deben tener plena participación en la definición de
políticas para preservar los equilibrios ecológicos del planeta.
7.
las condiciones de seguridad y movilidad
Todas las mujeres, en particular las mujeres solas y las más
desfavorecidas, deben tener fácil acceso al transporte para poder
desplazarse libremente y con toda seguridad. Es indispensable para entrar
verdaderamente en la vida económica, social y cultural de la ciudad. Las mujeres también tienen
“derecho a la ciudad”.
8.
el derecho a la vivienda y a un entorno de vida
Las mujeres tienen derecho a una vivienda y a un entorno de vida
apropiados.
9.
el factor género
Debemos admitir el factor
género en la ciudad como la fuente de una nueva cultura compartida, y
debemos participar en la definición de una nueva filosofía del
ordenamiento territorial.
10. la
educación y la experimentación local
Es importante que las escuelas, las universidades y los institutos
de arquitectura y urbanismo enseñen a considerar el factor género en la
ciudad. Es urgente lanzar la
experimentación en las ciudades para incitar al cambio.
11. la
función de los medios de comunicación y la transmisión de
competencias
Los medios de comunicación deben publicar mensajes contrarios a los
estereotipos, que den una imagen de la mujer conforme con su evolución y
su emancipación.
12. las
redes de información
Debemos crear una red para intercambio de información a escala
europea, para divulgar la Carta y apoyar la aplicación de sus
principios.
--------------------------------------------------- Objetivo: crear una red
europea La difusión de
la Carta en Europa y en las instituciones internacionales supone la
creación de una red europea dedicada a poner de relieve el factor género
para la definición del marco de vida y como aportación de conocimientos, a
ejercer influencia para una evolución de mentalidades y a promover la
aplicación de las conclusiones en todos los programas de ordenamiento
territorial, de gestión urbana y de organización de las comunidades
rurales. Esta red futura
también permitirá la conexión a otras redes y a las ONG de otros
continentes que comparten nuestra filosofía.
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